Celmira Luzardo Montenegro fue una reconocida actriz bogotana que durante más de 30 años fue una de las intérpretes protagónicas en la televisión colombiana.
Celmira, quien estará presente en la pantalla de Señal Colombia y RTVCPlay por su participación en la serie de misterio Los Cuervos, también es recordada por su participación en producciones de horario estelar como La tregua, Francisco el matemático o Yo soy Betty, la fea.
Nacida el 31 de marzo de 1952 en Bogotá, Luzardo hace parte de una familia de tradición artística, pues es hermana de la también actriz Consuelo Luzardo y del director de cine Julio Luzardo, lo que posiblemente influyó en su elección de carrera profesional. De acuerdo con sus biografías, la actriz inicialmente comenzó estudiando Ingeniería, pero pronto se decantó por la que fue su pasión definitiva: las artes escénicas.
Foto: Colprensa
Celmira Luzardo: una artista de tradición
Pese a que su profesión era casi un negocio familiar, Celmira escogió el camino académico fuera del país para prepararse en la actuación, y luego de abandonar la ingeniería se fue a Londres (Inglaterra) y comenzó a estudiar edición y montaje en “The National Film Institute” y, como si fuera poco, después se estableció en Italia para estudiar cine en el “Centro Sperimentale di Cinematografia”.
Una vez concluyó sus estudios en Europa, Celmira volvió a Colombia para iniciar de una vez y para siempre su destacada carrera como actriz de televisión. La primera aparición en la pantalla chica fue en la telenovela Volverás a mis brazos, emitida en 1971.
Dos años después en 1973, Celmira Luzardo participó en la miniserie La Herencia, en la que personificó a una conflictiva joven que sufre de una enfermedad mental.
La década del 70 y del 80 fueron muy prolijas para esta intérprete, pues participó además en su primera película titulada Esposos en vacaciones (1977) y en 1978 participó en la serie Manuelita Sáenz (1978), por la cual también se llevó elogios de la crítica. En 1979, apareció en la película Colombia Connection (1979) de Gustavo Nieto Roa, así como en la telenovela Kundry (1979).
En 1980 protagonizó la telenovela La tregua (1980), y cuatro años después en reapareció en las pantallas participando en las series Testigo ocular (1984) y Los cuervos (en la cual trabajo de 1984 a 1986). Además, en 1988 participó en la telenovela La sombra de otra (1988).
La calidad de sus interpretaciones, aunque no le valieron numerosos reconocimientos, la llevaron a ser considerada una diva colombiana de la década del 80, época en la cual figuró varias veces como portada de publicaciones como la revista Cromos, uno de los impresos más importantes del país por aquella época.
Para la década de 1990 Luzardo ya era una conocidísima actriz, al igual que su hermana Consuelo Luzardo, con quien trabajó en varias de las mencionadas producciones televisivas.
Durante esta década estuvo en cerca de una decena de telenovelas, entre ellas El pasado no perdona, Herencia maldita, La quinta hoja del trébol, La potra Zaina Cazados, La mujer del presidente o El amor es más fuerte.
Sin embargo, uno de sus momentos de máximo reconocimiento llegó en 1999 cuando llevó a la pantalla a un personaje redentor, cuando Celmira Luzardo encarnó al personaje de Catalina Ángel en la telenovela de Fernando Gaitán Yo soy Betty, la fea.
Este personaje fue uno de sus papeles más recordados en su carrera como actriz, pues su participación en la historia de la telenovela fue central al encargarse de dar el giro de convertir a Betty, el personaje principal, en una mujer casi radicalmente diferente, tanto en imagen como en actitud frente a la vida.
Celmira, tras más de tres décadas figurando como protagonista en la pantalla chica colombiana anunció su retiró como actriz en 2003, y se fue a San Andrés, Colombia, para tener una vida tranquila alejada del mundo del espectáculo.
Celmira es otra de esas actrices que sin importar cuánto tiempo pase, será recordada como una de las grandes actrices de la historia de la televisión colombiana.