'Un asunto de tierras' llega de nuevo a nuestra pantalla

Domingo

2 de septiembre 09:00 p. m. → 'Un asunto de tierras'

El documental 'Un asunto de tierras', la cinta de la realizadora colombiana Patricia Ayala Ruíz, llega de nuevo a la pantalla de Señal Colombia. Hablamos con su directora quien nos contó detalles reveladores acerca de su producción:

Señal Colomiba: Por favor cuéntenos la historia central de su documental...

Patricia Ayala:'Un asunto de tierras' da cuenta del primer año de implementación de la Ley de Restitución de Tierras, en Colombia, a partir de una comunidad, de la zona de los Montes de María, que aplica a este proceso.

SC: ¿Tenemos elementos de este documental que le aporten a la paz?

PA: Pienso que el aporte a la paz, más que en el contenido o los elementos de una película documental, está en las reflexiones y las preguntas que ésta pueda generar. En ese sentido, 'Un asunto de tierras' busca, precisamente, poner en escena un tema de debate álgido y necesario en la construcción de la paz: la tierra.

Atendiendo al momento histórico que vivimos, esta película busca aportar, desde la producción cinematográfica, una lectura de país, una reflexión sobre aquello que nos compete como sociedad en este justo momento: la construcción de la paz, entendida en su sentido más amplio. El arte juega un papel fundamental en esta construcción. La narración artística apunta a la preservación de la memoria, a la búsqueda de la verdad pero también del mito y del ritual. Por eso, el arte nos permite la catarsis, tan necesaria en una sociedad que ha sufrido los peores rigores del conflicto armado. El arte y el cine en particular, nos permite mirarnos en un espejo que nos invita a reflexionar sobre el tipo de sociedad que hemos construido después de tantos años de conflicto.

SC: Cuéntenos por favor algunas anécdotas o datos curiosos sobre la creación, el desarrollo y la finalización del documental.

PA: Hacer esta película significó estar, durante un año, en la misma disposición que puede tener un médico que se encuentra en una sala de urgencias. Sabíamos que en cualquier momento sería necesario acudir, equipo en mano, a registrar los acontecimientos que se fueran dando y que fueran pertinentes para la película. Pero no lo sabíamos con demasiada anticipación. Así que no fue un rodaje concentrado en dos o tres momentos definidos, como suele pasar con el documental, sino un rodaje extendido que en realidad se extendió a lo largo de dos años: empezamos a rodar en mayo de 2011 con la aprobación de la Ley en el Congreso y terminamos en abril de 2013.

SC: ¿Algún punto realmente difícil de enfrentar en la grabación del documental?

PA: La relación con las entidades de Gobierno fue complicada por momentos y en algunas zonas de los Montes de María se sigue sintiendo la tensión de la guerra; pero en realidad, lo más difícil de rodar esta película, es el ejercicio de concentración permanente, de filtrar la realidad y lo que nos arroja para saber qué debe ir quedando y que puede dejarse de lado, en el proceso de rodaje.