Colombia finalizó en el tercer lugar del medallero de los Juegos Centroamericanos y del Caribe. El resultado es alentador y deja grandes sensaciones pese a que el título no se consiguió y el objetivo de los 100 oros tampoco se alcanzó.
El podio es algo que se consiguió por quinta ocasión. Colombia se ha consolidado como una de las potencias centroamericanas junto a México, que ha ganado 11 títulos y Cuba, que se ha impuesto en 12 ediciones. Estos son los únicos dos países que han podido ganar esta competencia.
Colombia superó lo hecho en Veracruz. La delegación hace 4 años había logrado 70 oros, 75 platas y 78 bronces para un total de 223 medallas. Esta vez, la producción de oros incrementó a 79 al igual que subieron las platas y bronces conseguidos: 94 y 97 respectivamente. En total hubo 47 medallas más: 9 de oro, 19 de plata y 19 de bronce.
Para comenzar debemos mencionar que las sensaciones son buenas en los deportes de conjunto. El baloncesto femenino, el fútbol masculino, el polo acuático y el rugby masculino y femenino entregaron títulos centroamericanos al país, mientras que las selecciones de baloncesto masculino y de voleibol masculino y femenino consiguieron alcanzar finales históricas.
El atletismo también brilló. Colombia consiguió el título en este deporte con 11 oros por encima de favoritos como Cuba y Jamaica. El levantamiento de pesas también ratificó las expectativas con 13 títulos.
El tenis de campo también superó las expectativas con 2 medallas de oro, así como el baloncesto femenino que se convirtió en el primer equipo en vencer a Cuba, que hasta Barranquilla 2018 había ganado todos los oros que se habían disputado.
La natación y el patinaje de velocidad también fueron deportes en los que nuestro país se destacó. Isabella Arcila, en la natación, se convirtió en la multimedallista de Colombia con 4 de los 7 oros que este deporte dio. Por su parte, en el patinaje de carreras, Colombia logró 8 de los 10 oros en disputa.
Otro punto positivo para Colombia la organización de los Juegos. Barranquilla y las subsedes estuvieron a la altura de lo que se esperaba. La Puerta de Oro siempre tuvo público en las competencias y en cuestiones logísticas no hubo problemas.
El deporte que quedó en deuda fue el ciclismo. La pista entregó 5 oros menos, mientras que el ciclomontañismo no logró ratificar el título obtenido hace 4 años. La ruta y el BMX, por su parte, entregaron los mismo oros que en Veracruz 2014.
Un punto a analizar es el poco número de medallas de oro que entregaron los deportes mixtos: tan solo uno. En contraste, México consiguió 13 oros en esta modalidad.
La arquería tampoco tuvo una buena presentación. Se esperaban 5 oros, pero solo se pudieron conseguir 2. De igual forma, el tiro deportivo no entregó ningún título, aunque se esperaba 3.
Colombia, si bien no logró el objetivo de 100 medallas, sí demostró que sigue un proceso de superación constante. El objetivo de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 está en la mente de todos los deportistas y la progresión de la delegación colombiana se ve. Ahora quedan los Juegos Panamericanos 2019, el último escalón del ciclo olímpico.