Siempreviva es una película colombiana dirigida por Klych López que cuenta la historia de un grupo de vecinos durante la toma del Palacio de Justicia, hecho histórico que ocurrió en Bogotá en noviembre de 1985.
Un gran reparto de actores protagoniza esta cina. Entre ellos están Enrique Carriazo, Laura García, Andrés Parra, Laura Ramos, Andrea Gómez, Alejandro Aguilar y Fernando Arévalo.
Parra y Ramos interpretan a Sergio y Victoria, una pareja que vive en una pensión en la que comparten con otros inquilinos a los que los une el dolor por la desaparición de Julieta, una joven abogada recién graduada que nunca llega a su hogar, a pesar de salir con vida del Palacio.
Andrés Parra relató los detalles de su papel protagónico. "La construcción de mi personaje como Sergio, en el camino fui armándolo, con mucha ayuda de Enrique Carriazo y del director. Enrique fue quien vio la luz en cuanto a la relación de los dos personajes antagónicos (Sergio y Carlos) y fue gracias a ello que Sergio empezó a crecer, en parte por la enemistad y la competencia entre los dos", aseguró el actor en un evento promocional de la película.
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Así, trabajando de la mano con el director, sus colegas y con su propio personaje, Parra logró sacar a flote la historia de Sergio, un payaso triste que vive en el límite de la supervivencia y que debe empeñar lo poco que tiene para poder sobrevivir. Lleno de dolor y de celos, el personaje, aunque no asume el papel protagónico de la historia, termina robándose la atención del espectador.
El actor recuerda haber vivido la tragedia del Palacio de Justicia sentado en la cama de sus papás, mientras el televisor emitía las imágenes del recinto en llamas y la desesperación se reflejaba en la cara de sus padres.
"No sé si junto los recuerdos o así fue en realidad, pero recuerdo que viví entonces una semana en la que pasaron tres cosas impresionantes: lo del Palacio de Justicia y la voz de mi mamá hablando con teléfono con alguien y diciéndole que era el acabose porque ya era 'acá mismo', en el centro de la ciudad, 'esto se nos vino encima', 'está acá al lado', y de inmediato la tragedia de Armero y la muerte de Paquirri (el torero). Fue una semana trágica", aseguró.
Pero por la misma fragilidad con la que conserva ese recuerdo en su memoria valió la pena hacer el esfuerzo de recuperar el pasado para traerlo a flote a partir de esta historia íntima contado desde la vitalidad de siete actores, reitera Parra.
Parra aseguró que "Siempreviva va a ser parte de la historia cinematográfica del país". Y estar ahí ha sido un privilegio para él. Porque, a pesar de lo difícil que fue su rodaje, le aportó más a su oficio de lo que esperaba. "Soy actor porque no podría ser otra cosa. Si no fuera actor, sería actriz. No veo otra opción".