Desde 2010, la Academia Colombiana de las Artes y Ciencias Cinematográficas (ACACC) reconoce la búsqueda de la excelencia artística, técnica y narrativa de la cinematografía nacional con los Premios Macondo, un evento desarrollado en el marco de la semana del cine colombiano organizada por el Ministerio de Cultura.
Durante la última década, los Premios Macondo se han convertido en un referente de la producción del séptimo arte nacional, pues las nominaciones y los ganadores son escogidos de manera autónoma y democrática por los miembros de la ACACC, dentro de los que hacen parte más de 500 miembros de las artes escénicas y cinematográficas del país en especialidades como la escritura de guion, dirección, interpretación, producción, dirección de fotografía y vestuario, maquillaje, entre otros campos sin los que la realización audiovisual sería imposible.
La estatuilla de los Premios Macondo fue diseñada por el actor Roberto Cano y está inspirada en la flor del árbol macondo (Cavanillesia platanifolia).
Los Premios Macondo han dado cuenta del notable aumento en la cantidad y calidad de producciones cinematográficas colombianas durante los últimos años. Entre las películas ganadoras en la categoría mejor ficción han estado 'Los viajes del viento' (2009), 'El abrazo de la serpiente' (2015), de Ciro Guerra; 'Matar a Jesús' (2018), de Laura Mora, y 'La tierra y la sombra' (2015), de César Augusto Acevedo.
El canal Señal Colombia, por su parte, ha tenido una participación destacada en la categoría mejor documental de los Premios Macondo. 'Don Ca', una coproducción con Pathos Audiovisual y el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico, se llevó la estatuilla en dicha categoría. Dos años después, el documental 'Las últimas vacaciones', coproducido con Tatiana Villacob y dirigido por Manuel F. Contreras, obtuvo una nominación, pero en esa ocasión fue 'Infierno o Paraíso' el ganador.
En la edición 2019, el documental 'Homo botanicus', una coproducción entre Señal Colombia y Casatarántula, fue nominada en la categoría mejor documental. Esta cinta nos sumerge en los bosques frondosos colombianos, así como en la profunda relación que nace entre maestros y alumnos. En su desarrollo Quintero rinde homenaje al trabajo minucioso de Julio Betancur, un renombrado botánico del Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional.