Del día a la noche y luego un bonito amanecer. Así podría definirse la manera en que han transcurrido los 29 años de existencia de José Alexis Belisario Angulo, a quien le llegó a los 12 años la prueba más dura de su vida, la cual supo sortear y superar.
Los días eran radiantes en las sabanas de su Arauca natal, concretamente en Puerto Rondón, donde nació el 2 de agosto de 1989, en el hogar de José Antonio y Belkys. Además de estudiar en la Escuela Normal, jugaba a toda hora con sus hermanos Diana, Mayerli y Yoser, de los que era el mayor. Correr en la llanura, subirse a los árboles o meterse a casa en construcción a jugar escondidas era su afición.
Era un niño juicioso e inquieto, con apenas 12 años y toda una vida por delante. Pero en 2002 todo cambió para la familia Belisario Angulo. José Alexis tuvo un accidente, se cayó de frente, se golpeó la cara y se cortó. El fuerte impacto ocasionó una noticia devastadora a su familia: El pequeño sufrió desprendimiento de retina y perdió la visión de manera definitiva.
La depresión de José Alexis no se hizo esperar. “Fue muy duro, un golpe a mis ilusiones, a mis sueños. Usted no se puede imaginar siquiera lo que es poder ver y disfrutar todo y de un momento a otro quedar a oscuras. Cierre los ojos al menos cinco minutos, sin abrirlos, e intente hacer cosas. Eso siento yo, pero por el resto de mi vida”.
Su familia lo rodeó y le dio todo su apoyo. Empezaron a buscar todo tipo de soluciones y a animar al niño para que siguiera adelante. Poco a poco José Alexis se fue haciendo a la idea de que no volvería a ver.
“Por eso amo a mi familia. Mis padres y mis hermanos fueron mi soporte, me alentaron de una manera linda y me impulsaron a superarme”, sostiene.
Terminó sus estudios de bachillerato en la Institución Educativa Francisco José de Caldas. Se mantuvo como buen estudiante, con un gusto inmenso por las matemáticas, algo raro para un niño que ya mostraba su gusto por el deporte.
En 2007 se graduó y haciendo un curso de rehabilitación, dirigido por la profesora Yanine Martínez. Los dos convencieron a los compañeros de clase –Sonia Luna, Nabeida Arrieta, Felipe Correa, Sandra Porras y Daisy Pinedo- de tomar como actividad complementaria el deporte-.
Dada la aceptación plena, decidieron fundar el Club de Limitados Visuales de Arauca, Clivear. Optaron por el atletismo. José Alexis comenzó con 100 y 200 metros planos y salto largo, pero iban cambiando cada determinado tiempo. Finalmente se quedó en 100 metros, lanzamiento de disco, salto largo y lanzamiento de jabalina.
Además siguió estudiando. Primero se graduó como Tecnólogo en Educación Física en el SENA, y actualmente cursa noveno semestre de Administración de Negocios y Comercio Internacional en la Universidad Remington en Arauca.
Se casó hace 9 años con Claudia Eslava, con quien tiene tres hijos: María Fernanda, de tres años, y los mellizos Samuel y Manuel, de siete meses, quienes son el núcleo de su existencia. Con ellos disfruta algunos momentos libres entre semana, pero eso sí, todo el domingo, cuando descansa y se entretiene con ellos jugando, saliendo o escuchando música.
“Me gusta la música llanera, la romántica. Me gusta enamorar a mi esposa cada día y por eso soy así”, cuenta.
Su rutina diaria lo lleva a levantarse temprano y entrenar de seis a nueve de la mañana y de tres a seis de la tarde. Sale directo de su casa de tejas de zinc, con piso en concreto, ubicada en el sector de Flor de mi Llano, por las vías polvorientas de su barrio hacia el estadio Municipal.
De allí pasa al Gimnasio Santa Teresita, junto con su entrenador Fleyder Heredia. Estudia, trabaja, entrena y ya en la noche llega a su hogar.
Hace 9 años ingresó a la selección Colombia Paralímpica y ha obtenido al menos 20 medallas de oro. Ha estado en Copas del Mundo en Estados Unidos, Argentina, México, Francia y Chile.
Debutó en los Parapanamericanos de Guadalajara en 2011 con la medalla de bronce en los 4x100 metros planos. Y en los de Toronto 2015 fue bronce en los 4x100 metros planos T11/T13, quinto en lanzamiento de disco masculino F11 y medalla de oro en lanzamiento de jabalina F117F12 con 36,04 metros, superando al también colombiano Franco Contreras, quien hizo 34,81. El bronce fue para el venezolano Aníbal Bello con 34,25 metros.