Drácula de Bram Stoker (1992) es una película estadounidense dirigida por Francis Ford Coppola, escrita por James V. Hart, y producida por Columbia Pictures.
Basada en la novela Drácula del escritor irlandés Bram Stoker, esta película es protagonizada por Gary Oldman, Winona Ryder, Keanu Reeves y Antony Hopkins, y resultó ganadora de tres premios Óscar en las categorías de Mejor Diseño de Vestuario, Mejor edición de sonido y Mejor Maquillaje.
Drácula de Bram Stoker está ambientada a finales del siglo XIX, época en la cual el joven abogado Jonathan Harker viaja a un castillo perdido al interior de Transilvania (Rumania) donde conoce al conde Drácula, quien intentará adueñarse de la pareja de Harker, pues le recuerda su amor perdido en pleno oscurantismo.
Conoce con nosotros de qué trata la novela Drácula, la película de Franc Ford Coppola y la historia del verdadero Drácula: Vlad Tepes.
¿Qué trata la historia de Drácula?
Drácula de Bram Stoker se desarrolla en el año 1897, cuando el recién graduado abogado Jonathan Harker es enviado a Transilvania para adelantar algunos trámites inmobiliarios con el Conde Drácula, pues el misterioso conde ha adquirido unas propiedades en Londres, Inglaterra.
Desde la llegada del joven abogado al castillo, e incluso desde el trayecto hacia la morada de Drácula, Harker empieza a notar que el conde no es quien dice ser, sino que más bien se trata del mítico príncipe rumano Vlad Tepes, ferviente caballero de la Orden del Dragón que se transformó en "vampiro humano".
El Príncipe Vlad se hizo famoso porque alguna vez derramó toda su ira contra Dios y renunció a él, luego del suicidio de su esposa la princesa Elizabetha, el gran amor de su vida, quien se arrojó desde una torre de su castillo hacia las aguas del río Arges.
Las cosas se complican para Harker durante su visita al castillo del Conde Drácula, pues además de sentirse enturbiado por la presencia del conde, el abogado comete el error de mostrarle una fotografía de Mina Murray, su pareja, y quien extrañamente es la viva reencarnación de la princesa rumana que tenía el corazón del conde.
Desde ese momento Drácula se obsesiona con Mina, por lo cual Drácula decide viajar hacia Londres para conocerla, conquistarla y darle sus poderes vampíricos y así volver a estar con ella eternamente.
Para mantener fuera del juego a Harker, Drácula le da la tarea a sus novias que se aprovechen de sus debilidades y alejarlo progresivamente de Mina.
Por fortuna Drácula va dejando huellas de su actuar y aparece en el panorama Abraham van Helsing, quien rápidamente deduce que un vampiro acecha la sociedad londinense.
Rápidamente Mina, luego de conocer a Drácula, empieza un romance furtivo con el conde, quien se presenta con muy buen aspecto ante ella, y le propone ser amantes por siempre.
La lucha comienza después que Jonathan Harker escapa del castillo y se refugia en un monasterio, desde el cual escribe a Mina pidiéndole que se embarque a Rumania y que se case con él en el monasterio.
Tras regresar a Londres con Mina, Harker le dice a Van Helsing que pueden atrapar a Drácula en la abadía Carfax, la propiedad que el mismo Harker le vendió, y donde encuentran al llegar varias cajas con tierra de Transilvania, en las que Drácula puede recuperar su poder.
Así inicia la batalla de Harker y su grupo para derrotar al casi invencible Conde Drácula, en medio de una empresa en la que unos débiles hombres y mujeres tendrán que enfrentarse al poder de un hombre inmortal que con poderes y sabiduría hará todo lo posible por detenerlos que quedarse hasta el fin de los tiempos con su amada.
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¿Quién fue Drácula en la vida real?
El Conde Drácula es el protagonista de la novela homónima de horror gótico del escritor irlandés Bram Stoker, y es la representación vampírica prototipo desde la publicación del libro.
Desde la publicación de la novela ha inspirado personajes de obras de ficción posteriores, lo cual se ha visto reflejado en una larga lista de versiones del personaje en cine, cómics, teatro y otras producciones culturales.
Este personaje es inspirado por “Vlad Tepes el empalador”, el drácula histórico Príncipe de Valaquia quien vivió durante el siglo XV, y quien se hizo famoso por la crueldad durante su gobierno, dando pie así a una leyenda terrorífica que pasó a la literatura de la mano de Bram Stoker.
Su nombre probablemente hace parte de las leyendas centroeuropeas sobre vampiros y no muertos. De acuerdo con la National Geographic, Stoker tuvo conocimiento de la existencia de un príncipe rumano llamado “Vlad Draculea”, y quien se había hecho célebre, entre otras cosas, por su gusto hacia lo sanguinario.
Según la misma publicación estadounidense, el sobrenombre de Drácula se debe a una confusión, pues su padre, el príncipe Vlad II de Valaquia había ingresado en 1428 en la Orden del Dragón (Drac, en húngaro), por lo que fue conocido en adelante como Vlad Dracul, mientras que a su hijo se le llamó Vlad Draculea, que traduce, hijo de Dracul.
Según explica la revista, en la mitología rumana la figura del dragón no existía y el término dracul designaba al diablo, motivo por el que Vlad III pasó a ser en rumano “el hijo del diablo”.
De Vlad se dice que era un maestro de la crueldad y ánimo sanguinario, pues se trataba de un príncipe aficionado a la tortura y a las muertes lentas, y que incluso solía cenar bebiendo la sangre de sus víctimas o mojando pan en ella.
Se calcula que en sus primeros siete años de gobierno ejecutó a unas 100.000 personas, la mayoría mediante la técnica del empalamiento, lo que le dio el sobrenombre de Vlad el Empalador.
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