Una de las mejores y más emblemáticas jugadoras de rugby en Colombia nos contó cómo fue su dura travesía para volver al país en medio de la pandemia y cómo ha llevado su vida desde la cuarentena.
Con más de 11 años de carrera en el rugby, Alejandra Betancur es una de las figuras y referentes de este deporte que ha ganado un amplio reconocimiento en Colombia. Su trayectoria, su entrega y el nunca rendirse la han llevado a competir en los certámenes más grandes del mundo como los Juegos Olímpicos de Río 2016. Hablamos con ella desde su casa en Antioquia, para que nos contará cómo ha sido llevar el proceso de cuarentena y cómo fue ese duro regreso a Colombia cuando la pandemia la cogió montada en un avión.
Señal Colombia Deportes: ¿Cómo empezó esta odisea llamada pandemia para Alejandra Betancur?
Alejandra Betancur: Me cogió a 8500 kilómetros de Colombia, a mi la pandemia me toca en un avión hacia Madrid-España ya que tenía un partido el 14 de marzo, el día que llegué a esa ciudad decretaron la cuarentena, tan pronto empezó, todo estaba normal, no pasaba mucho, pero solo 11 horas después la vida cambió del cielo a la tierra. Fueron unas semanas difíciles que tuve que afrontar sin la certeza de saber qué estaba pasado, mientras estaba ahí, encerrada en el piso (apartamento) con mis compañeras, empezaron los rumores del cierre de la frontera de Colombia.
SCD: ¿Cuánto tiempo pasas en Madrid y cómo es esa travesía para volver a Colombia?
AB: Todo cambió entre el 17 y 18 de marzo cuando el rey decretó la alerta roja, ahí bloquearon todo Madrid (España), cierran aeropuertos y empiezan todas las restricciones, en ese momento me di cuenta de la seriedad del asunto. Luego de esto, me entero que el presidente Iván Duque anunciaba el cierre de las fronteras aéreas para el 23 de marzo, eso fue más duro porque había viajado con un motivo, con un sueño y lamentablemente empezaba a escaparse.
Ya con la cabeza más fría y habiendo asimilado toda esta información empiezo a mirar qué hacer. Hablo con la aerolínea pero lamentablemente no había vuelos disponibles y los que habían costaban mucho dinero, además, mi viaje de regreso estaba programado para el 6 de abril y ante las circunstancias todo sería diferente. Las opciones no eran muchas por eso llamé al consulado de Colombia, les expliqué mi situación, ellos anotaron mis datos con el fin de encontrar una solución; el 20 de marzo me llamaron de la aerolínea informado que tenía tiquete de regreso a Colombia para el siguiente lunes.
Se llegó el día, empaqué mis cosas y viajé. Llegué a Bogotá en el penúltimo vuelo que dejaron ingresar al país antes del cierre de fronteras.
SCD: ¿Cómo fue el vuelo, cómo fue ese viaje de regreso?
AB: El vuelo fue una locura, había gente que estaba tosiendo, me tapaba por todo lado y me preguntaba ¿Si venía gente enferma? En fin… Cuando llegamos a Bogotá, el vuelo estuvo detenido en la pista por cuatro horas porque había gente que venía con COVID 19 en el avión, entonces la evacuación fue por fases mientras hacían todos los protocolos y las pruebas respectivas, toda una odisea. A parte, los vuelos solo llegaban a Bogotá, yo iba para Medellín, lo que demandaba otro protocolo para poder viajar hacia mi destino final, en resumidas cuentas y luego de todo esto llegamos bien.
Destaco el trabajo de las autoridades en Bogotá, se hicieron todas las pruebas, tomaron todos los datos necesarios. Al llegar a Medellín fue igual, cuando llegué a Barbosa (donde queda ubicada la finca de los papás), la gente encargada hizo el seguimiento, llamadas, atención a síntomas hasta que cumplí los 14 días de cuarentena descartando cualquier posible contagio.
SCD: ¿Cuál es el mayor cambio que la pandemia le trajo a tu vida?
AB: Lo más duro es dejar de ver y entrenar con las personas que lo haces regularmente, el hecho de llevar más de tres meses sin ponerte unos guayos es duro y más cuando lo hacíamos 5 o 6 veces a la semana. También que tu rutina cambia totalmente, trabajo con el deporte, juego, soy entrenadora en Madrid y pasar de lo tangible a lo virtual fue complicado. Sin embargo también me ha dejado cosas muy bonitas, puedo decir que lo más bonito ha sido pasar tiempo con mis padres.
SCD: ¿Cuáles eran los planes antes de todo esto?
AB: Uno de los principales planes era jugar en Madrid las semifinales de la Liga Iberdrola con la Universidad Complutense Cisneros, uno de los torneos más importantes de España, en abril viajábamos con la Selección Colombia para disputar contra Kenia uno de los cupos al repechaje para el mundial de rugby, todo esto quedó en suspenso.
SCD: ¿Cómo entrenas en cuarentena teniendo en cuenta que tu deporte es el rugby?
AB: Hacemos una vez al día de gimnasio, realizamos sesiones por tiempos más que por repeticiones que nos ayudan a alcanzar un buen tono muscular. También trabajamos rutinas de mantenimiento, desarrollar habilidades en este momento es difícil porque no tenemos los elementos necesarios, lo que estamos haciendo es tratar de mantener lo ganado para no perder el trabajo de estos años.
Toda esta situación ha sido entretenida porque los entrenadores se las ingenian para que siempre sean diferentes y agradables. De manera individual hago énfasis en gimnasio y técnica con balón para mantener la postura que tendría en el campo de juego.
SCD: ¿Cómo te ha ido con la nutrición en este tiempo de aislamiento?
AB: Mi problema no ha sido con la nevera, mi problema ha sido con mi mamá (se ríe), yo llevaba 3 años viviendo fuera del país y estaba acostumbrada a cocinar mi comida, sin embargo llegas (a la finca) y para tu mamá se vuelve algo único. Cuando te sirve lo hace como al resto de la familia, las porciones son grandes; sin embargo ha sido divertido el tema porque ha significado un aprendizaje para las dos; me tocó explicarle por qué no como arroz y por qué consumo más proteínas que carbohidratos. Cabe aclarar que no he podido dejar es la arepa, llevo un mes y medio intentando no comer pero la verdad es que llevaba tantos años sin tener acceso a ellas que es difícil controlarlo.
Es importante no consumir azúcar, no tomar gaseosas, como buenas porciones de fruta, además de tomar agua, consumo al menos 3 litros al día para mantenerme en forma.
SCD: ¿Cómo les ha ido con el apoyo de las instituciones en estos tiempos?
AB: Yo creo que nuestra federación ha sido muy afortunada, casi todos nuestros sponsors siguen apoyándonos, así como debo destacar el soporte del Comité Olímpico Colombiano, Coldeportes e Indeportes Antioquia con videoconferencias, psicólogos y conferencias para el deportista en estos tiempos de pandemia.
SCD: ¿Hay alguna característica que puedes perder por no estar en el terreno de juego?
AB: Sí, el hecho que estemos en cuarentena hace que perdamos ritmo y contundencia en el juego, va a tomar un tiempo recuperar esto sobretodo en Colombia, esto lo digo porque a nosotros nos tocó adaptarnos a lo que teníamos en la casa.
SCD: ¿Hay alguna fecha tentativa para volver a la cancha?
AB: El Ministerio del Deporte nos entregó una guía de la vuelta a la cancha, lamentablemente por el tipo de deporte que practicamos seremos los últimos, es decir que estamos enmarcados en la fase 4 de reactivación deportiva, por ahora trabajar para mantenernos esperando a que en agosto podamos volver.
SCD: ¿Qué tanto afectarán al rugby los nuevos protocolos de seguridad deportiva?
AB: Va a ser difícil adaptarse sobre todo por el contacto y el roce que existe en este deporte. Creo que los protocolos del rugby tienen que ser diferentes, seguramente se basarán en lo que en estos momentos están trabajando en los clubes europeos. Eso sí, tiene que ser mucho más cuidadoso el protocolo con los deportistas fuera de las canchas para garantizar que ninguno nos convirtamos portadores del virus.
SCD: ¿Qué fue lo más difícil de la cuarentena?
AB: Lo más difícil fue regresar a Colombia, fue una odisea completa.
SCD: ¿Qué fue lo más fácil?
AB: El trabajo que hemos generado con las integrantes del equipo, todas hemos logrado entender y seguir con las metas a pesar de las dificultades y la distancia.
SCD: ¿Qué papel ha jugado la familia en este tiempo de aislamiento?
AB: Todos los deportistas de alto rendimiento decidimos en un momento dejar la familia a un lado. Volver a venir a estos espacios es importante, sin embargo debes adaptarte, las rutinas cambian y más en familia. Estos dos meses han sido espectaculares, volver a conectarme y estar con ellos ha sido muy bueno, cocinamos juntos, hacemos pan, natilla, mazamorra, cosas que en normalmente no haríamos. Obviamente han habido momentos difíciles pero son más las cosas buenas que hemos encontrado en esta pausa obligada.
SCD: Un mensaje para tus compañeros y compañeras del mundo del rugby
AB: Hay que esforzarse mucho en este tiempo para no tirar por la borda el trabajo de tantos años, el sueño del mundial sigue por eso hay que trabajar más duro.
SCD: Un mensaje para toda la gente que nos lee
AB: La humanidad en cada uno de nosotros debe permanecer, nos debe siempre importar el otro, aprendamos a compartir lo que tenemos, me niego a estar en mi casa sabiendo que alguien no tiene qué comer, en momentos como estos tenemos mucho por dar.
Terminamos esta entrevista agradeciéndole a esta gran deportista colombiana por llevar el nombre de Colombia a lo más alto a través de uno de los deportes más bonitos y exigentes que hay en el mundo.