Los ciclistas se pueden asemejar a los dioses de la mitología romana. Nairo Quintana, del equipo Movistar, lidera en la montaña y Rigoberto Urán, del Etixx-Quick Step, es invencible en la prueba contrarreloj; así como Júpiter y Neptuno, alguna vez, se dividieron el dominio de la tierra y el agua respectivamente. El antioqueño podría ser Saturno también, el dios del tiempo, porque un reloj no es problema para sus pedalazos, ya lo demostró en el Campeonato Nacional de Ruta cuando se llevó la prueba en la CRI.
Pero si de rapidez se tratara Miguel Ángel Rubiano, del Team Colombia sería Hermes. Siempre astuto, determinante y decidido; así como cuando se fugó del pelotón en la tercera etapa de la Vuelta a Andalucía. Sin duda, nuestros corredores parecen seres del más allá. A simple vista, sus piernas no sienten dolor y hasta la más difícil de las montañas parece un terreno llano. El británico Mark Cavendish y el español Alberto Contador son los otros dioses a vencer; sobre todo este último quien va en busca de defender el título y proteger el tridente que se lleva el ganador de la competencia. Ese mismo que según la mitología romana utilizaba Neptuno para calmar las aguas.
Convertirse en el dios romano del ciclismo no será fácil. Los corredores deberán luchar contra grandes escaladas, pedalearán al lado de su ejército y deberán ser los más veloces. De seguro, encontraremos grandes batallas entre guerreros que lo darán todo por obtener la camiseta azul de líder. Quien sea capaz de dominar la ‘Carrera de los mares’ no sólo tallará su nombre entre los mejores en la ruta, sino que también celebrará con Baco, amo del vino y la danza, su pasaje al encantador mundo de los dioses.
Foto: Página de Facebook Tirreno Adriático