Imágenes: Colprensa
Fallece Fernando Botero, Perfil, Obra
15 / 09 / 2023

Fernando Botero, el artista de los pesos pesados


Por David Jáuregui Sarmiento
David Jáuregui Sarmiento
15 / 09 / 2023
Imágenes: Colprensa
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Fernando Botero, considerado el más destacado artista plástico colombiano, murió este viernes en Montecarlo, Mónaco, donde vivía desde hace décadas.

El país y la industria de las artes plásticas colombianas amanecieron de luto con la noticia, pues no sólo se trata de un destacado artista colombiano, sino de un hombre que expandió las fronteras simbólicas del país a través de su expresión artística, caracterizada por el manejo del volumen en la pintura y la escultura.

Tal es su importancia que Medellín declaró, tras conocerse su fallecimiento, siete días de luto. Allí, en su ciudad natal, y donde en diversas plazas públicas reposan sus obras, se programaron diferentes actos de homenaje, tanto en la Plaza Botero, creada para la exhibición gratuita en el centro de Medellín, como en diversos lugares de la capital antioqueña.

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Distintos personajes del país, como el presidente de la República, Gustavo Petro y los expresidentes Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe lamentaron hoy el fallecimiento del pintor colombiano Fernando Botero a los 91 años.

“Lamentamos profundamente la muerte del maestro Botero, un grande del arte, de la cultura, pero un grande también por su amor por Medellín, por su amor por Colombia, por su amor por Latinoamérica. Su obra, su vida, su legado quedará plasmado en esta ciudad a la que él amó tanto y en la que dejó tantas obras. Rendiremos homenaje en Plaza Botero y en los diversos lugares de la ciudad donde su obra hoy está plasmada y donde vivirá para siempre. Muchas gracias, maestro Botero”, expresó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle.

El presidente de la República, Gustavo Petro, así como la vicepresidenta Francia Márquez también lamentaron la partida del artista. “Ha muerto Fernando Botero, el pintor de nuestras tradiciones y defectos, el pintor de nuestras virtudes. El pintor de nuestra violencia y de la paz. De la paloma mil veces desechada y mil veces puesta en su trono”, dijo el Presidente de la República Gustavo Petro.

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¿Quién fue Fernando Botero?

Fernando Botero es uno de los colombianos más universales, más exhibidos, cuyas obras voluminosas son inconfundibles. Botero murió rodeado de sus hijos y sus nietos, cuatro meses después del fallecimiento de la artista plástica Sophia Vari, quien falleció el pasado 5 de mayo.

Nacido el 19 de abril de 1932 en Medellín, en un hogar humilde, Botero fue el segundo de tres hermanos que perdieron a su padre cuando aún eran infantes, por lo que tuvieron que dejar los juegos para apoyar con trabajo a la economía del hogar, la cual se sostenía con arreglos y costuras de Flora Angulo, su madre.

Con apenas 15 años le vendió un dibujo a un vecino, lo que sería el presagio del hombre que décadas después vendería sus obras por millones de dólares, todas con un sello inconfundible que hicieron famosa su expresión artística: seres orgánicos dotados de gran volumen, coloridos, y muchas veces relacionados con la realidad del país.

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En sus obras están inmortalizados toreros, trabajadoras sexuales, campesinos, sacerdotes de distantes épocas, personajes de la vida nacional, todos expuestos en museos y calles de países como Estados Unidos, Japón, México, Italia, Alemania, España y Francia, entre muchos otros.

Algunos de sus cuadros también fueron contestatarios con respecto al contexto internacional, como el conjunto de 45 piezas que revelaron los vejámenes cometidos por los militares estadounidenses en la cárcel de Abu Ghraib, obra que despertó los elogios de muchos y las críticas de sectores conservadores que consideraron su obra como “antiamericana”.

Botero empezó su camino hacia la fama cuando apenas era un adolescente. Publicó sus primeras ilustraciones en la revista dominical del diario El Colombiano, y a los 19 años partió hacia Bogotá con el propósito de hacerse una carrera como artista plástico.

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Para 1952 ganó el Premio Nacional de pintura y usó el dinero del galardón para viajar a Europa en un barco. Pese a ello, destacan sus biógrafos, Botero nunca dejó su acento antioqueño, y en sus cuadros siempre estuvo presente la Colombia de su infancia, los personajes tristes del país, así como la violencia que ha inundado de sangre la historia de Colombia.

Sin embargo, la gran revelación para Botero, lo que lo llevaría a la cima del arte internacional llegó en 1956, mientras dibujaba un boceto de una mandolina de trazos carnosos y con un orificio pequeño, lo que le dio la dimensión al volumen que se convirtió en su sello.

"Mi talento fue haberme dado cuenta de lo que había sucedido ahí, que era importante para mí", aseguró el artista sobre aquel momento, al director de cine canadiense Don Millar, quien realizó un documental que tituló Botero.

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Pero fue hasta la década de 1970 que las puertas del ámbito artístico internacional se abrieron para Botero cuando Dietrich Malov, el director del Museo Alemán, llevó a Berlín su obra para exponerla. Fue en ese momento que la obra de Fernando Botero alcanzó la fama internacional.

La extensa obra de Botero está en manos suyas, de marchantes, de coleccionistas y muchos de sus cuadros, avaluados en millones de dólares. En marzo de 2022 fue noticia que una de sus obras, titulada Hombre a caballo fue subastada en Sotheby 's en la cuantiosa cifra de 4,3 millones de dólares, cerca de 17 mil millones a cambio de 2023. Hombre a caballo es, entonces, tal vez la obra más importante de Botero en términos económicos.

Este artista antioqueño, además, se caracterizó por su aporte a Medellín y al país. 

Fernando Botero, obra, perfil

Siete óleos, un pastel y dos acuarelas, fue la primera donación que Fernando Botero le hizo al Museo de Antioquia, pero no fue la única, ni la más importante que le hizo al país.

En el 2000, Botero donó al Museo de Antioquia 116 piezas, de ellas 23 esculturas monumentales que se instalaron en el parque que antecede al museo, en el corazón de Medellín. Además de 32 obras de artistas internacionales que estaban en su colección privada.

Meses después, como si fuera poco, Botero donó al Banco de la República 208 obras, 123 suyas y 85 de artistas extranjeros. Frente al tamaño de la colección, el Banco Central abrió el Museo Botero, en el centro de Bogotá, de entrada libre y en el cual dejó ya no sólo su huella como artista, sino también como promotor del arte en el país.

El museo se ha posicionado desde entonces como un lugar para conocer el arte contemporáneo en medio del ambiente colonial del centro histórico de la capital.

“Para mí es un placer infinito saber que estas obras pertenecen hoy a Colombia, saber que los estudiantes que ingresen a esta casa, entrarán en contacto con las corrientes artísticas más importantes de nuestro tiempo, contemplando aquí permanentemente, obras originales de grandes maestros; saber que los amantes de la pintura y la escultura puedan venir a visitar este remanso de paz y pasearse tranquilamente por estas salas, dejándose inundar por la estética moderna”, dijo Botero en su momento.

En 2004 el reconocido artista también donó cerca de 40 óleos al Museo Nacional con algunos de sus más recientes trabajos, obras que buscaban reflejar la realidad del conflicto colombiano con la mirada propia de su arte.

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La paloma de la paz, una obra con intensidad humana

La hermosa estatua de la paloma de la paz fue entregada por Botero como muestra de apoyo al proceso de paz con las FARC durante el Gobierno Santos en 2016.

"Con la escultura 'La paloma de la paz' me uno a este proceso trascendental de la paz en Colombia. Quise hacerle este regalo a mi país para expresar mi apoyo y mi solidaridad con este proceso que les brindará un futuro de esperanza e ilusión a todos los colombianos. ¡Enhorabuena por Colombia!", explicó el maestro.

La Paloma de la Paz mide 70 centímetros de altura, es blanca, con el pico dorado y regordeta, como toda su obra.

Esta historia está manchada por el odio, y de nuevo por la reconciliación, pues durante el Gobierno de Iván Duque fue retirada de Palacio, tal vez por el desprecio de aquel gobierno hacia las intenciones de paz del país, pero fue vuelta a instalar en el inicio del Gobierno de Gustavo Petro.

Fernando Botero es un nombre imborrable en la historia del país no sólo por su aporte a la historia de las artes plásticas en Colombia, sino también por su forma de retratar y ayudar desde su disciplina a mejorar las condiciones de existencia de los colombianos. 

Señal Colombia lamenta la partida de este gran artista colombiano, y celebra su vida y su obra.

Descanse en paz, maestro Botero.

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*Con información de Colprensa.