Payasos y terror forman una combinación difícil de olvidar. Desde Pennywise hasta Art el Payaso, estas figuras deformadas por el horror han protagonizado algunas de las escenas más perturbadoras del cine, marcando generaciones completas y redefiniendo para siempre la llamada “coulrofobia cultural”.

Payasos que hicieron historia en la pantalla del terror
La popularidad reciente de Welcome to Derry (Bienvenidos a Derry), precuela del universo de It, ha reavivado el interés por los payasos como figuras malignas. Pero antes de esta nueva ola, hubo personajes que cimentaron su reino del miedo. Estos son los cinco más icónicos.
Art el Payaso: Terrifier y el renacer del horror extremo
Art el Payaso irrumpió en Terrifier (2016) como una fuerza brutal, casi sobrenatural, que mezcla humor macabro con violencia gráfica extrema. Su silencio absoluto, su maquillaje desgastado y su sadismo sin límites lo convirtieron rápidamente en un fenómeno del terror independiente.
El impacto de Art radica en su crudeza: representa un regreso al gore sin filtros, convirtiéndose en uno de los villanos más reconocibles del cine de terror moderno.

El Payaso de El Payaso del Mal: la maldad como herencia maldita
En El Payaso del Mal (Clown, 2014), la historia parte de una premisa inquietante: un disfraz que posee a su portador hasta convertirlo en un demonio devorador de niños. El protagonista, Kent, se transforma progresivamente en una criatura aterradora, mostrando cómo la identidad de un payaso puede ser un símbolo de corrupción física y moral.
Su impacto está en combinar terror corporal, folclore oscuro y tragedia familiar, convirtiéndolo en uno de los relatos más perturbadores de la década pasada.

Pennywise (1990): It, la miniserie que traumatizó a toda una generación
El Pennywise interpretado por Tim Curry en la miniserie It de 1990 es, para muchas personas, la cara definitiva del terror. Con su voz burlona, su humor retorcido y su amenaza constante, Curry elevó al personaje a un nivel icónico.
Su poder radica en el contraste entre la apariencia inocente del payaso y su verdadera esencia: una entidad cósmica devoradora de miedos. Pennywise 1990 marcó profundamente la televisión de los ochenta y noventa y sembró terror en millones de espectadores alrededor del mundo.

Capitán Spaulding: la risa más siniestra del universo de Rob Zombie
El Capitán Spaulding, interpretado por Sid Haig, aparece por primera vez en La casa de los mil cadáveres (2003) y rápidamente se convierte en el rostro más memorable del terror sucio y grotesco de Rob Zombie.
Spaulding combina humor negro, violencia impredecible y un carisma perverso que desconcierta y aterroriza. Su relevancia se basa en ser un payaso realista —no un monstruo sobrenatural—, lo que amplifica su efecto inquietante.

Pennywise del remake y Bienvenidos a Derry: la reinvención del miedo
Mención especial
Bill Skarsgård renovó al personaje en It (2017) con una interpretación más física, animal y perturbadora. Su Pennywise se mueve de forma antinatural, rompe el espacio visual con sonrisas imposibles y devuelve al personaje la esencia alienígena del libro de King.
El remake impactó a nuevas generaciones, convirtiéndose en un fenómeno global.
Ahora, con la serie Welcome to Derry, el mito se expande aún más. La producción profundiza en el origen de la criatura y en las raíces del terror de la ciudad, ampliando el universo narrativo y ofreciendo nuevas capas psicológicas a la figura del payaso más temido del cine moderno.

Los dos Pennywise: contrastes que marcaron épocas diferentes
Ambas versiones comparten la esencia del mal, pero se diferencian claramente:
Tim Curry (1990):
- Humor perverso, presencia teatral, terror psicológico.
- Un villano que seduce para después aterrorizar.
- Ícono televisivo y referencia cultural absoluta.
Bill Skarsgård (2017–2019):
- Movimiento corpóreo anormal, gestos inquietantes y un enfoque más monstruoso.
- Un payaso que parece una criatura que intenta imitar lo humano.
- Renovación cinematográfica con fuerte impacto visual.
Ambos reflejan su tiempo: uno más televisivo, sarcástico y psicológico; el otro más visceral, digital y monstruoso.
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Un legado que sigue creciendo
Los payasos del terror no solo son personajes: son símbolos culturales que desafían lo que consideramos seguro y familiar. Desde los clásicos hasta las nuevas reinterpretaciones, su impacto sigue vigente, especialmente hoy, con el renovado interés que series como Bienvenidos a Derry han despertado en el público.


