“Me gustaría ser Hulk”: Carlos Mario Oquendo
Y no está lejos de su sueño, porque lo más parecido a Hulk que tiene este bicicrosista antioqueño, medallista olímpico en Londres 2012, es la tolerancia al dolor. Hace más de 20 años, sufrió su primera caída en la pista Belén de Medellín: sus papás Carlos Alberto y Élide vieron desde la tribuna cómo la bicicleta subió muy rápido en el primer morro de la pista y le reventó la boca al niño. Hasta donde recuerda, Oquendo tiene más de diez cicatrices en su cuerpo, seis tornillos en la mano izquierda y once en la clavícula. Y se ríe sobre su prontuario.